Premio Nobel de la Paz 2007 afirma que el rescate del Ozama es un proyecto de cohesión nacional




Santo Domingo, 25 de febrero de 2015.- Mohan Munasinghe, Premio Nobel de la Paz en 2007 y especialista en desarrollo sostenible, dijo en el Almuerzo Mensual de la Cámara Americana de Comercio (AMCHAMDR) de que la clave para que pueda producirse el saneamiento Ozama e Isabela es que exista equilibrio entre lo social, lo económico y lo ambiental a través de un proceso de cohesión entre el gobierno, la sociedad civil y el sector privado, lo que lo convierte en un proyecto nacional.

Munasinghe, orador invitado de AMCHAMDR, es asesor de la Coalición RIO, organización multisectorial comprometida con el mejoramiento social, cultural, turístico, económico y ambiental de las comunidades y las áreas de influencia de los ríos Ozama e Isabela que tiene entre sus fines generar el consenso necesario para para implementar un plan maestro integral de intervenciones para el rescate y saneamiento de esas cuencas hídricas.

Durante su discurso, afirmó que sanear el Ozama es posible, lo que relacionó con el desarrollo de una metodología de trabajo está basada en ciertos principios. "El primero de estos principios es que queremos tener en equilibrio los aspectos social, económico y ambiental". En segundo lugar, mencionó al rol que debe desarrollar Coalición RIO como catalizadora de un triángulo conformado por gobierno, sociedad civil y sector privado.

La tercera base para poder alcanzar el objetivo de saneamiento, que serviría de ejemplo para otros proyectos de desarrollo sostenible en el país con la integración en el proceso de las comunidades, es que debe entenderse el proyecto como un proyecto nacional. "Los involucrados o actores claves están en todo el país".

Por último, el Premio Nobel de la Paz se mostró convencido de que se puede lograr la meta. "Existen muchos ejemplos en todo el mundo que lo demuestran, pero debemos trabajar pensando en el largo plazo. Puede haber logros a corto plazo, pero el marco de referencia de la Coalición RIO debe ser de largo plazo".

Vidal: alianzas público-privadas

Antes de la presentación de Munasinghe, Máximo Vidal, presidente de AMCHAMDR, tuvo unas palabras en las que insistió en que las alianzas público-privadas "son la mejor fórmula a nuestra disposición para poder lograr un mayor impacto para el desarrollo sostenible". El principal representante de la organización empresarial dijo que el sector público puede aprovechar el dinamismo y voluntad de progreso del sector privado jugando su papel en un esfuerzo que debe ser mancomunado para generar valor compartido a nivel social y económico "en un mundo en el que los retos son tan grandes y la necesidad de recursos tan inmensa, que el Estado no tiene la capacidad de afrontar los unos y generar los otros por sí solo".

En tal sentido, Vidal dijo que lo que el Estado sí puede hacer es tomar decisiones y emprender acciones llamadas a garantizar un buen clima para las inversiones y los negocios. "Trabajar en ámbitos como el de la energía, con énfasis en el papel de las renovables; las infraestructuras físicas y tecnológicas, donde cabe mencionar la importancia de la banda ancha; la fiscalidad y el sistema financiero, donde el mercado de capitales puede cobrar una trascendencia fundamental, por citar algunos ejemplo, no es solo contribuir con el desarrollo sostenible, sino también con nuestro futuro sostenible. AMCHAMDR reitera su disposición para avanzar en agendas de valor compartido".
Durante sus palabras, el presidente de la Cámara también habló del trabajo que realiza la organización en materia de desarrollo sostenible a partir de su programa de RSE "Mano con Mano". Anunció una convocatoria con fondos de contrapartida para el desarrollo de cinco proyectos que se seleccionaran de entre las propuestas que presenten empresas interesadas en ello. También recordó que este año AMCHAMDR celebrará la tercera entrega de sus Reconocimientos a las Mejoras Prácticas en RSE y animó a las empresas a presentar sus postulaciones.
"A todo esto que les he dicho lo podemos llamar de diferentes maneras: responsabilidad social, desarrollo sostenible, inversión social... Pero lo verdaderamente importante no es el nombre, sino la firme decisión que existe de trabajar para la construcción y fortalecimiento de un ADN de sostenibilidad en nuestras empresas socias, que permee hacia lo interno de cada una de ellas y que impregne por igual a cada uno de los públicos objetivos con los que se vincula su gestión.


Fuente: www.amcham.org.do